La siguiente Esta es una carta escrita en el año 2070 una carta futurista, cuando tus hijos y tus hijas la lean, cuando tus nietos la reciban ya será demasiado tarde:
Yo naci en año 2020 y acabo de cumplir 50 pero mi apariencia es de 85 años tengo serios problemas en los riñones porque bebo muy poco agua. Recuerdo cuando era niño había arboles en los parques las casas estaban rodeadas de jardines y yo podía disfrutar de un baño quedándome una hora bajo la ducha Ahora usamos toallas humedecidas en aceite mineral para limpiar la piel. Antes, antes las mujeres mostraban sus lindas cabelleras, ahora tienen que raparse la cabeza para mantenerse limpia sin gastar el agua. CUIDA EL AGUA ES LIMPIA, Recuerdo que había muchos anuncios así pero nadie los hacia caso, pensaban que el agua jamás se podría terminar, ahora… los ríos, los lagos están contaminados , agotados, las infecciones del estomago, de las vías urinarias, las enfermedades de la piel son las principales causas de muerte, la edad media de la población es de 35 años. Las fabricas desalinizadoras son las principal fuente de trabajo y pagan con agua potable, en lugar de salario. Los asaltos por un bidón de agua son comunes, casi todos los alimentos son sintéticos. Antes la cantidad de agua indicada para un adulto eran 8 vasos por día, hoy solo puedo beber medio vaso. Cuerpos desfallecidos, arrugados por la deshidratación, con llagas en la piel por los rayos ultravioletas. La capa de ozono no alcanza filtrarlos. Los científicos investigan sin encontrar solución. el oxigeno es escaso por falta de arboles, el gobierno cobra por el aire que respiramos 137 metro cubicos diarios por habitante. Quienes no pueden pagar son retirados de las zonas ventiladas dotadas de pulmones mecánicos que funcionan con energía solar. En algunos países quedaron riachuelos y son fuertemente vigilados por el ejército. El agua se ha vuelto un tesoro muy codiciado, más que el oro o los diamantes. Aquí en cambio no hay arboles porque casi no nunca llueve y cuando el suelo se humedece es por la lluvia acida. Mi hija me pregunta: Papa cuéntame cuando era joven, le describo lo bonito que eran los bosques, las flores, pescar en los ríos, beber agua fresca y mi hija siempre me pregunta: Papá y ¿porque se cabo el agua?. Siento un nudo en la garganta, me siento culpable pertenezco a la generación que provoco el desastre, Ahora nuestro hijos y nuestras hijas pagan un precio demasiado alto como me gustaría volver atrás, cuando todavía podíamos hacer algo para salvar la tierra.